Cómo evitar que un perro ladre excesivamente

Encontrar la manera de evitar que el perro ladre puede ser una tarea difícil y consumidora de tiempo.

perro-ladrandoLos perros aman ladrar. Es algo perfectamente natural, del mismo modo que es normal para los humanos hablar. Es cuando los perros ladran en exceso que se convierten en un problema para todos los involucrados, incluyendo a los vecinos irritables. Teniendo en cuenta esto, el objetivo realmente no es que el perro deje de ladrar por completo, sino más bien controlar los ladridos excesivos. Hay que tener en cuenta que hay situaciones en las que se quiere que el perro ladre (como también supongo que hay momentos en que se quiere que una tía locuaz pare de hablar). El primer paso para modificar el comportamiento excesivo de un ladrador es determinar, en el primer lugar, la razón por la cual lo hace. Una vez que se ha identificado esta causa o desencadenante, a continuación, se puede planificar el entrenamiento adecuado para solucionarlo.

¿Por qué ladran los perros? Detenerlo ahora

• Expresar sus necesidades (ser mandón).

• Algunos perros son criados para ladrar (algunos Terrier y perros de caza).

• Están vigilando su territorio.

• Para alertar a su dueño y su familia de peligro inminente.

• Cuando juegan, por pura emoción. Es un tipo muy común de ladridos en los cachorros.

• Ladrándole a otros animales. Dependiendo del lugar en que se encuentre en el mundo, será el animal al que le ladre.

• Si están aislados.

• Algunos perros ladran excesivamente cuando se separa de su hogar (dueño y demás miembros de la familia).

• Si están atrapados detrás de algún tipo de barrera como una cerca o una ventana.

• Simplemente por diversión.

• Expresar dominio (los cachorros normalmente prueban en algún momento dominar a sus dueños con un despliegue de ladridos).

• Ladran porque sus dueños inadvertidamente han recompensado ladridos excesivos en el pasado (esto es crucial para comprender)

• Por aburrimiento o falta de estimulación física y mental.

• Puede sentirse estresado o incómodo por alguna razón: cosas como sentirse amenazado o si no tienen un lugar apropiado para dormir pueden causar problemas de ladridos excesivos.

• Los perros que no han sido correctamente socializados a menudo se convierten en molestos ladradores.

• Puede estar buscando una respuesta o alguna atención de los miembros de la familia.

Otra cosa a tener en cuenta es que, a pesar de que parezca que el perro está ladrando a la nada, esto no es necesariamente el caso, siempre se debe considerar el hecho de que tiene un sentido mucho más agudo del oído, el olfato y la vista de los humanos. Los ladridos excesivos siempre se desencadenan por algún motivo.

Detener los ladridos de un perro. Pero ¿Cómo? Ya se sabe el motivo de los ladridos excesivos de este,, sólo hay que encontrar la manera de controlar el problema. La pieza más importante de consejos para recordar cuando se trata de modificar cualquier problema de comportamiento del perro es que se le debe comunicar claramente lo que es un comportamiento aceptable y lo que no lo es. Uno de los errores más grandes que los dueños de perros cometen es premiarlo inadvertidamente cuando ladra de manera excesiva. En realidad, se fomenta y refuerza el problema de ladridos cuando se cometen estos tres pecados en el entrenamiento del perro:

«Nunca recompensar los ladridos de un perro»

1. Gritarle y gritarle al perro. Esto sólo le da la atención que estaba pidiendo a ladridos. Además, es muy probable que piense que se está uniendo a él recompensando su excitación.

2. Dejarlo dentro de la casa. Si el perro está ladrando y se le deja entrar a la casa es la recompensa que estaba esperando y por tanto reforzará los ladridos. Esto también se aplica a los perros que ladran para ser liberados de una jaula o para que le preparen la comida.

3. Si el perro está ladrando y la reacción es darle un abrazo reconfortante o un regalo de algún tipo, eso  sin duda lo animará a ladrar de nuevo. De esta manera se le está comunicando que se está feliz con él. Hay que dejarle claro que su ladrido excesivo es inadecuado y no será tolerado.

Estas son algunas técnicas de entrenamiento probados en perros para ayudar a detener sus ladridos. Aquí van las razones más comunes por las que un perro puede ladrar y algunas soluciones probadas que pueden intentarse para aliviar el problema.

El perro enloquece cada vez que suena el teléfono. Este es un momento muy común y molesto porque los perros ladran excesivamente. Se recomienda probar con estas técnicas de entrenamiento:

  • Nunca gritarle al perro.

• Hacer que el perro se adapte al sonido del timbre del teléfono sin hacer algo muy grande. Marcar el número de la casa desde el teléfono celular o pedirle a un amigo que lo haga. Cuando suene el teléfono sólo sentarse allí, sin decir o hacer nada. Repetir este proceso unos pocos días, el perro probablemente continuará ladrando por un tiempo pero se dará por vencido.

• Si se le da al perro entrenamiento básico de obediencia, los problemas de comportamiento, tales como ladridos excesivos, serán fáciles de controlar. Verá que su dueño es  su líder firme pero justo y estará ansioso por complacerle en cualquier situación. Mediante la enseñanza en el entrenamiento de obediencia de las órdenes de  “Silencio” o «Detente», pronto corregirán este problema.

• Otro método que está relacionado con el punto anterior es para solicitar un comportamiento alternativo cada vez que suena el teléfono. Así que en vez de que el perro ladre y sea una molestia cada vez que se está hablando por teléfono, se le dice «ve a tu lugar» en la esquina.

• Es posible que se tenga algo de éxito al cambiar el estilo y el volumen del tono del teléfono.

El perro ladra cuando el dueño no está en casa

No se puede decir que este tipo de ladrido será fácil de controlar, porque en realidad es a menudo un proceso largo y difícil. Lo que si hay que recordar siempre es que los perros son criaturas sociales y cuando se separa de su manada puede llegar a estresarse, sentirse vulnerable y frustrado. Este tipo de ladrido excesivo es a menudo causado por la ansiedad de separación.

• En primer lugar hay que utilizar el sentido común y conseguir complacer las necesidades del perro, mantener el perro bien ejercitado (física y mental) y proporcionar agua fresca, juguetes de mascar y un buen lugar que sea cómodo y agradable para dormir. También se puede tratar de bloquearle la visibilidad para que no vea los perros de la calle y otras distracciones. Básicamente, es asegurarse de que el perro es feliz.

• Si se sabe que el perro ha estado ladrando mientras no se está en la casa, debe ignorársele por un tiempo una vez que se retorne. Esto es difícil para muchos propietarios, pero de lo contrario creerá que su ladrido fue la razón por lo cual se regresó a casa con él. Sólo hay que ocuparse de algo por un tiempo al llegar, haciendo caso omiso de él. Cuando el perro se haya estabilizado, entonces se iniciará el contacto con él. Hay que tener en cuenta que este método se aplica a los perros que ladran en el momento en que se llega a casa.

«Hay que transmitirle un mensaje claro y consistente al perro en todo momento»

• Esta técnica toma tiempo y paciencia, pero puede ser una manera muy eficaz para poner fin a los ladridos del perro. Se basa en esa regla importante aplicable a todas las situaciones de entrenamiento de perros: Alabanza o recompensa cuando hace algo que se desea así como animar y crear una reacción negativa cuando hace algo que no agrada. Salir de la casa como se haría normalmente, pero en realidad será para esconderse en un lugar cercano. Cuando el perro comience a ladrar, se le rocía con agua o se le tira una lata llena de monedas o piedras en su dirección (esto es la reacción negativa). Hay que tratar en todo momento de mantenerse fuera de la vista del perro mientras se hace esto, si es posible. Nuevamente se vuelve al lugar en que se estaba, si se queda tranquilo por un tiempo, entonces se entra a la casa y se le premia por su buen comportamiento con algunos elogios y tal vez una golosina. Este proceso puede ser que se necesite repetir una y otra vez hasta que haya roto el hábito de ladrar de manera excesiva.

Las técnicas anteriores han demostrado tener éxito con mis propios perros, pero si no funciona para ti, tal vez podrías intentar con una Citronella o collar de ladridos. Una vez más este método utiliza el poder de la asociación negativa. Cada vez que el perro ladre, una fina niebla de citronela se esparce en el aire. La mayoría de los perros odian el olor y pronto se dan cuenta de que si no ladran, el olor no está allí para molestarlos. Si se tiene más de un perro este método no es realmente una solución adecuada. Siempre es mejor optar por un entrenamiento adecuado antes de considerar como una opción el uso de la Citronella o un collar de ladridos.

El perro ladra por atención o para exigir algo. Este es un problema de ladridos en exceso que puede ser corregido muy rápidamente.

  • Si se establece la base de líder de un perro en una relación dueño-perro, este tipo de ladrido no será un problema. En el proceso de formación también se podrá formar un fuerte vínculo basado en la confianza y el respeto mutuos. Para aprender la mejor manera de entrenamiento de obediencia de un perro se recomienda visitar la página web “dogproblems.com”.
  • También se puede enseñar al perro los comandos de «Detente» o «Silencio» para ayudar a prevenir cualquier problema de ladrido molesto. Cuando el perro está ladrando simplemente se le dice «¡Silencio!» al mismo tiempo que se le hace señas con un sabroso manjar delante de la nariz. Después de que el perro se queda tranquilo durante unos segundos entonces se le da la golosina. Eventualmente sólo se tendrá que decir «¡Silencio!», sin necesidad de darle una recompensa.
  • Otro método probado para ayudar a evitar que el perro ladre buscando atención es simplemente ignorándolo. Sin duda se sentirá frustrado y al principio ladrará mucho, pero una vez que se dé cuenta de que no le está resultando, se detendrá. Atención,  este método de entrenamiento puede ser molesto para los oídos por un rato. Recordar siempre que el comportamiento de un perro que no se premia o recompensa prevalecerá por menos tiempo.

El perro ladra a los transeúntes

 Los trabajadores como el cartero o el conductor de la entrega son constantemente hostigados por ladridos a lo largo del día.

El perro percibe este tipo de personas como intrusos o una amenaza a su territorio. Cuando ladra en esta situación es recompensado cada vez, ya que el intruso se va, entonces, muy contento de que ha evitado esta «amenaza», lo lleva a hacerlo una y otra vez. Su comportamiento se ve reforzado y por lo tanto puede ser un problema muy difícil de extinguir. Si es posible, se podría tratar de bloquear su visión o el acceso a la zona por la que estas personas pasan.

El entrenamiento de obediencia de un perro es la mejor solución para este tipo de ladrido excesivo. Una vez que se haya entrenado correctamente, se le podrá comunicar que este es un comportamiento inaceptable.

Si el perro ladra constantemente a una persona en particular, es posible que se tenga que utilizar a esta persona para ayudar a modificar su comportamiento. Sólo decir que su perro se pone muy agitado cada vez que el cartero llega no resolverá nada, tenga una charla con su cartero y dele un poco de golosinas, las favoritas del perro y cada vez que se entrega el correo a su casa también puede proporcionar un sabroso manjar para el perro. En la mente del perro, el cartero pasará de ser una amenaza, a un invitado bienvenido.

Cómo hacer para que el perro deje de ladrar

 En casos extremos de ladridos excesivos, cuando todo lo demás ha fallado, algunas personas abogan por la cirugía. Nunca he necesitado ir por este camino con ninguno de mis perros y creo que nunca lo haría. Pero si se ha llegado al final de la línea y se cree que ya no quedan opciones, se puede hablar de esta cirugía con el veterinario. Esperemos que el veterinario venga con algunas otras opciones antes de tomar esta medida drástica.

El entrenamiento de obediencia apropiada para un perro es la clave para la solución de los problemas de conducta (incluida la interrupción de sus ladridos) y, también a la construcción de un fuerte vínculo con él.

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