Cosas que debes saber sobre un cachorro de Yorkie

dos yorkies tacita de teNo hay que subestimar el tamaño del Yorkie por el repiqueteo de sus pequeñas patas y su cuerpo menudo que puede caber dentro de un bolso. Este es un gran perro atrapado dentro de un cuerpo pequeño. Debes tener cuidado porque los cachorros de Yorkies pueden ser irresistiblemente lindos y pueden derretirte el corazón en mil pedazos.

Máquinas de orinar. Debes tener una gran cantidad de cojines para cachorros y mucha paciencia ya que esta raza no tiene mucha contención de la orina. Equipados con pequeñas vejigas y una renuencia a mojarse o salir al frío, los Yorkies están entre los primeros perros en la lista de razas más difíciles de entrenar para que hagan sus necesidades. Si vives en un área fría y lluviosa, una zona de baño al aire libre que esté cubierta puede ayudar a convencer a tu Yorkie de que salir a hacer sus necesidades no es tan malo como pensaba. No te olvides de alabarlo cada vez que elimine en el exterior.

Chuchos juguetones. Cuando tu cachorro no esté haciendo sus necesidades de forma activa en tu alfombra preciosa, puedes entretenerte con las payasadas entrañables que hace. A los Yorkies les encanta jugar y disfrutar de hacer cualquier cosa que te llame la atención. Como esta raza fue utilizada en las fábricas textiles y las minas de carbón con el propósito de cazar alimañas, son naturalmente atraídos por los juguetes que chillan. Si vas a comprarle un juguete chillón, asegúrate de mantener siempre un ojo en tu Yorkie ya que puede masticarlo y extraerle el sonajero e incluso decidir tragárselo entero.

Cachorros diminutos. Cuando es joven, un cachorro de Yorkie tiene los huesos finos y puede ser especialmente frágil y propenso a las lesiones. Debido a esto tendrás que tener mucho cuidado para manipularlo. Al igual que con otras razas de Toy, siempre vigila tus pasos al caminar y mira detrás de ti cuando vayas a sentarte para evitar aplastarlo y asfixiarlo de manera accidental. Debido a la fragilidad de esta raza no le va bien con los niños ya que pueden lesionar a un cachorro accidentalmente.

Aguafiestas. Debido a que los Yorkies son propensos al «síndrome de Napoleón», a medida que crecen y se vuelven más audaces pueden tratar de enfrentarse a un perro más grande que no les gusta, pero el perro más grande puede ver fácilmente a un cachorro de Yorkie que es ladrador como un manjar irresistible. Para proteger a tu cachorro de problemas debes tenerlo siempre con una correa y mantenerlo alejado de los perros más grandes. Proteger a tu cachorro de los perros más grandes es necesario para evitar que se convierta en un sabroso postre.

Ladrador compulsivo. Cuando se le da la oportunidad, un Yorkie se sentirá obligado a ladrar por el más mínimo ruido que escuche. Si quieres un perro guardián agudo esta raza te hará feliz. Si no eres un fan de los ladridos puedes querer encontrar desesperadamente un botón para silenciarlo. No dejes que la lengua afilada de tu Yorkie se te vaya de las manos. Cuanto antes establezcas normas suaves e implementes el entrenamiento constante será mejor.

Caprichosos. Esta raza puede ser un poco quisquillosa a la hora de comer. Algunos adquieren este mal hábito después de que comen las sobras de la mesa y comienzan a rechazar su alimento regular. Si tu cachorro de Yorkie está oliendo constantemente su comida, asegúrate de observarlo y toma algunas medidas para prevenir que le dé una hipoglucemia, una condición potencialmente fatal que las razas pequeñas son propensas a sufrir.

Cachorros que les gusta complacer. Cuando es bien socializado, un Yorkie es cariñoso con su dueño y hace lo posible para conseguir toda la atención que pueda. A pesar de esto, si no es bien socializado puedes terminar con un Yorkie ladrador que desconfía de todo y de todos. Asegúrate de dedicarle mucho tiempo a la socialización de tu cachorro durante el período crítico de la socialización primaria. Un Yorkie bien socializado y con un temperamento adecuado se desarrolla de manera próspera con la compañía y el amor humano.

Esta entrada fue publicada en Cachorros, De la raza. Guarda el enlace permanente.