Como los humanos, los perros disfrutan y deben consumir variedad de alimentos diferentes. A pesar de que descienden de los lobos, y por lo tanto son clasificados como carnívoros, las investigaciones muestran que los perros son omnívoros mono gástricos. Esto significa que, además de carne, los perros pueden disfrutar de variedad de otras fuentes de alimentos. La rotación de la comida de su perro no sólo es agradable para sus papilas gustativas, sino que también puede evitar posibles alergias a los alimentos.
Beneficios de la rotación. En estado salvaje, los perros obtienen minerales y vitaminas por comer varios tipos diferentes de comida. Con la mayoría de las dietas comerciales, las vitaminas y los minerales ya pueden ser parte de la comida de su perro, ya que la mayoría de los alimentos comerciales investigan las necesidades dietéticas exactas de perros en diferentes etapas de sus vidas. Puedes elegir entre variedad de alimentos; croqueta cruda, seca, alimentos enlatados o una combinación de las anteriores. La rotación todavía es importante, sin embargo, pues la rotación del alimento ayuda a prevenir alergias a la proteína.
Reacciones alérgicas. Las reacciones alérgicas se producen en perros que son alimentados con el mismo alimento durante largos períodos de tiempo; el sistema inmune del perro comienza a identificar un ingrediente alimentario como perjudicial, liberando de anticuerpos para luchar contra la alergia. Una reacción alérgica es, a menudo, el primer indicio de la necesidad de cambiar la comida de tu perro. Las alergias pueden manifestarse de variedad de maneras, incluyendo picazón en la piel, puntos calientes, rojo y piel de aspecto crudo, malestar estomacal y diarrea.
Cómo girar la comida de su perro. No es necesario cambiar la comida de tu perro sobre una base diaria o incluso semanal, aunque se recomienda que gires la comida cada tres meses o menos. El nuevo alimento puede ser de la misma marca, y un sabor diferente, o puede optar por elegir una marca completamente nueva. Para girar a la nueva comida, haga la transición lentamente en el transcurso de una semana. Con cada comida, dele de comer cantidades crecientes de los nuevos alimentos, y disminuyendo a cantidades menores el alimento anterior, hasta que haya cambiado por completo a la nueva comida.
Consejos y trucos. El vómito o diarrea durante la transición es una señal de que es posible que estés cambiando demasiado rápido, o que el perro es alérgico a algo en el nuevo alimento. Intenta frenar la transición en principio, pero elimina el alimento nuevo por completo si esto no ayuda. Gire la comida de su perro entre por lo menos tres fuentes diferentes de proteínas, como la carne de res, cordero y pollo, para mejores resultados. Como siempre, consulte con el veterinario de tu perro antes de hacer cambios extremos a su dieta.
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