Diferencias entre las convulsiones y los accidentes cerebrovasculares en los perros

perro-enfermoVer a tu perro pasar por un accidente cerebrovascular o una convulsión puede ser aterrador, sobre todo porque no puede decirte con palabras lo que está sintiendo. Es por eso que aprender a conocer los síntomas y brindarle la debida atención para las convulsiones y los accidentes cerebrovasculares pueden ayudar a tu perro en un momento determinado.

Causas. Las convulsiones y los accidentes cerebrovasculares tienen diferentes causas en los perros, al igual que ocurre en los seres humanos. Una convulsión es el resultado de un mal funcionamiento eléctrico en el cerebro, similar a una tormenta eléctrica en el cerebro que causa síntomas de convulsiones. Si tu perro tiene convulsiones repetidas, el veterinario podría diagnosticarle epilepsia canina. La epilepsia canina puede tener una base genética o resultar de una lesión cerebral o un desequilibrio químico. Las convulsiones también pueden ser causadas por accidentes cerebrovasculares, aunque la causa principal de un accidente cerebrovascular es física en lugar de eléctrica. Un derrame cerebral se produce cuando una arteria se bloquea o se produce sangrado dentro del cerebro.

Síntomas. Algunos de los síntomas visibles de un perro que tiene un accidente cerebrovascular son también síntomas de una convulsión. Tal vez los síntomas más evidentes de un accidente cerebrovascular son problemas con el equilibrio y los movimientos. Puedes ver que tu perro inclina la cabeza a un lado o tiene problemas para caminar. Si un lado del cerebro está dañado por un accidente cerebrovascular, tu perro puede caminar en círculos mientras se inclina hacia el lado dañado del cerebro. Después de un accidente cerebrovascular, tu mascota podría tener problemas para controlar los intestinos y la vejiga. La incontinencia es un síntoma de una convulsión en curso, pero es poco probable que sea un problema continuo después de que la convulsión ha terminado. Otros síntomas de las convulsiones incluyen caerse, temblar y tener convulsiones rígidas y sacudidas en algunas partes o en todo el cuerpo. Los ojos de tu perro podrían virarse durante una convulsión y perder la conciencia durante un período de tiempo.

Qué hacer. Siempre consulta a un veterinario con experiencia en lo que respecta a la salud y el tratamiento de tu mascota. Si sospechas que tu perro está teniendo un accidente cerebrovascular, acude al veterinario de inmediato. Los accidentes cerebrovasculares son relativamente inusuales en los perros y la posibilidad de recuperación aumenta si este sobrevive y comienza a recuperarse en los días siguientes al evento. En el caso de una convulsión, puedes ayudar a prevenir la ocurrencia de más lesiones si retiras rápidamente cualquier muebles u obstáculos que esté cerca de tu perro. Mueve a tu perro lo más lejos posible de peligros tales como fuegos o piscinas y de lugares que pueda caerse. Coloca almohadas suaves o mantas alrededor de la cabeza y la espalda de tu perro y mantenlo alejado de las otras mascotas que tengas en el hogar. Cuando tu perro recupere la conciencia, dale un espacio tranquilo para que descanse y se recupere.

Tratamiento. Una convulsión única no requiere de un tratamiento específico. Sin embargo, si tu perro está experimentando convulsiones epilépticas regulares, el veterinario puede prescribirle un medicamento anticonvulsivo. Puedes ayudar a prevenir otras convulsiones proporcionándole a tu perro un horario regular para comer y dormir, impidiendo que salte sobre y fuera de superficies como los sofás; en las razas pequeñas con tendencias a problemas de espalda, una lesión en la espalda y en el cuello puede precipitar una convulsión. Si tu perro ha tenido un accidente cerebrovascular, el veterinario tratará de determinar la causa antes de prescribirle el tratamiento. Si el accidente cerebrovascular implica hinchazón del cerebro, los corticosteroides se prescriben comúnmente para reducir la hinchazón. Los perros pueden recuperarse bien de los accidentes cerebrovasculares, a menudo en sólo unas pocas semanas. Sin embargo, algunos cambios permanentes pueden permanecer.

Esta entrada fue publicada en Problemas de salud. Guarda el enlace permanente.