Fácil no es la primera palabra que viene a la mente cuando se trata de cualquier actividad con un Jack Russell terrier, exceptuando la realización de travesuras, es un pequeño perro independiente, aventurero y activo, pero estos buenos adjetivos pueden variar. Es posible entrenarlo, en especial si identificas el trabajo que más le gusta hacer.
Comprender a un Jack Russell terrier. Para entender la mente de tu Jack Russell terrier debes buscar en sus antecedentes y para lo que la raza fue criada originalmente. Son perros de caza criados para matar roedores. Tu Jack con entusiasmo tratará de matar a los animales más pequeños que se crucen en su camino: ardillas, conejos, ardillas listadas y felinos del vecindario. Inteligente y luchador, este perro puede ser agresivo hacia otros perros. Puede atacar a otros perros más grandes sin pensar en las consecuencias así como a otros de su misma raza. Es importante que tengas presente que dos Jacks nunca deben ser dejados solos, incluso si son pareja.
Temperamento. El Jack Russell terrier es por naturaleza adicto al trabajo y sin una labor que realizar la energía que tiene se canaliza hacia actividades más dudosas, las cuales posiblemente hayas experimentado si vives con uno. Puede ser pequeño pero es un terrier y no un Toy. Esta raza requiere de mucho ejercicio tanto físico como mental. Piensa dos veces antes de adquirir uno si vives en un apartamento a menos que puedas llevarlo a dar largos paseos todos los días. Si tienes un patio cercado, revisa la cerca con frecuencia para asegurarte de que es a prueba de terrier ya que les gusta cavar mucho. Aparte de matar a las ratas, la excavación es probablemente su actividad favorita. Ladrar está entre los primeros lugares de su lista de prioridades.
Cachorro. La capacitación debe comenzar después de que tu Jack Russell terrier tenga dos meses de edad aproximadamente. No sólo la formación básica es importante, hay que socializarlo con las personas, otros perros y gatos. En ocasiones no son buenos con los gatos ya que los ven como una presa, así que asegúrate de que tu cachorro entienda que no puede cazarlos. Lleva a tu cachorro de “jardín de infantes” a aprender obediencia básica. Por encima de todo debes hacerle entender de una manera suave pero firme que tú eres el jefe y no él. Esa lección debe ser inculcada desde edades tempranas para que no crees un monstruo.
Entrenamiento. La consistencia y la disciplina son fundamentales para la formación de un Jack Russell terrier. Asegúrate de proporcionarle a tu perro el entorno que requiere. Esta raza necesita de tu atención, incluso la atención negativa es mejor que nada para él si no le dedicas mucho tiempo. Muchos Jack Russell terrier terminan en refugios por hacer lo que viene en su naturaleza como comportarse agresivamente, cavar y ladrar. Si necesitas ayuda con tu perro busca un entrenador que conozca las necesidades especiales de la raza.
Pruebas para terrier. Tu atlético Jack puede no ser el mejor estudiante de la escuela de obediencia pero puede brillar en pruebas para terrier. Estos eventos incluyen carreras, cavar, caza simulada, agilidad, obediencia, competir con otros Jack Russell terrier, arrastrarse y localizar su presa viva y el salto de altura. Ambos pueden divertirse y estrechar lazos de unión durante el entrenamiento y la competencia.
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