¿Los labradores se llevan bien con los gatos?

labrador retrieverAunque algunos Labradores son hostiles con los gatos, la mayoría pueden ser entrenados para llevarse bien con ellos. El entusiasmo y el tamaño de los perros pueden parecer amenazantes al principio, pero cuando se acostumbren el uno al otro, los Labradores y los gatos en ocasiones pueden llegar a ser los mejores amigos.

Establecer la relación entre dos mascotas. Un gato mayor puede tener confianza de sí mismo frente a un perrito enérgico pero no frente a un Labrador adulto aterrador y abrumador. Por otro lado, un gatico puede acercarse a cualquier Labrador con audacia, pero sus locas travesuras podrían hacer que tu perro convierta tu casa en un desastre. Cuando elijas el nuevo miembro de tu familia, si es un gatico o un Labrador, debes tener en cuenta la personalidad de la mascota que ya tienes para que entonces busques un animal con un temperamento similar.

Primeras interacciones. Presta mucha atención al actuar del gatico y el Labrador. Muchos gatos no tienen ningún reparo en hacerle saber a un perro cuando ha sobrepasado los límites con maullidos e incluso un zarpazo. Los Labradores a menudo no se dan cuenta de lo grandes que son de adultos y pueden poner las dos patas delanteras que pesan de 55 a 80 libras en el hombro de un gato. Entonces ¿qué juego puede no ser amenazante para este? No querrás que una de tus mascotas sienta miedo de la otra, por lo que debes separarlas de inmediato si ves señales de tensión o si están demasiado irritadas.

Rasgos del Labrador que afectan la convivencia con los gatos. Aunque los Labradores tienen un buen instinto de presa, esta no es una de sus características principales ya que la raza fue desarrollada para buscar y recuperar en lugar de cazar. Esto es una buena noticia para tu gato, exceptuando que tu Labrador podría tratar de «recuperarlo» y llevarlo en su boca. Por suerte para todos estos perros suelen ser inteligentes, quieren agradar y responden bien cuando tienen una formación estructurada y formal. Se sienten muy motivados por las golosinas por lo que puedes enseñarlo para que juegue con cuidado con el gato o al menos para que cuando este lo ignore no sea un desafío.

Cómo ayudar para que un gato se adapte a vivir con un Labrador. Tu gatico necesita lugares seguros lejos del perro. Si aún no tienes un árbol para el gato, considera buscar uno para que este pueda ir y venir de un lugar alto en el cual se siente seguro. Proporciónale una habitación o un armario lejos del perro donde pueda comer, beber y utilizar la caja de arena sin ser interrumpido. Una puerta para mascotas en ocasiones funciona bien para mantener al cachorro alejado permitiendo que el gato pueda entrar y salir cuando le plazca. Con el espacio, el tiempo y la atención, el gato debe darse cuenta de que el Labrador no es una amenaza y podría convertirse en su mejor amigo.

Esta entrada fue publicada en De la raza, Preguntas frecuentes, Socialización y agresión y etiquetada . Guarda el enlace permanente.