¿Podría un perro morir si come caca de gato?

perro gato en la mesaEs mejor para la salud de tu perro que no le guste el sabor del excremento de los gatos. La respuesta básica a esta pregunta es afirmativa, es posible que tu perro muera si come caca de gato. Aunque es probable que el hábito es más desagradable que mortal, como dueño de un perro al que le gusta comer las heces de los gatos debes entender los peligros que esto puede ocasionar.

Coprofagia canina. Los veterinarios tienen un término técnico para las dolencias de origen animal. Los perros que comen caca, incluyendo las heces de gato, se llama coprofagia canina. Aunque los perros no lo consideran anormal, los veterinarios si lo hacen si el hábito conduce a comer más caca que la comida normal. Los perros disfrutan de alimentarse de caca por una serie de razones. La primera es que el hábito satisface su necesidad primitiva de forrajear. En segundo el olor es atractivo para los perros y tiene un alto contenido de proteínas.

Parásitos. El problema con los cachorros que comen la caca de los gatos es que el excremento está lleno de parásitos. Esta una de las razones por las que mujeres embarazadas son advertidas del peligro que representa para ellas limpiar las cajas de arena. Las heces de gato contienen el parásito Toxoplasma gondii que causa la toxoplasmosis. La ingestión de caca de gato no es la única forma en que tu perro puede estar expuesto a esta enfermedad que, con mayor frecuencia, produce fiebre, convulsiones, debilidad muscular, falta de coordinación, pérdida de peso, vómitos, diarrea y letargo, pero si es la más común. Se requiere un análisis de sangre para confirmar el diagnóstico, se utilizan antibióticos para tratar la infección y en la mayoría de los casos, los perros se recuperan.

Adhesión y obstrucción. Cuando un perro come caca de gato, al mismo tiempo está obligado a tragar arena para gatos. Como la arena para gatos se adhiere la orina de estos, una vez que el perro se la come, la orina queda expuesta a los jugos gástricos del sistema digestivo del perro. Si bien es raro y un perro tendría que comer el equivalente a una cena de siete platos de caca con arena, sí existe la posibilidad de que la ingesta suficiente de arena pueda causar una obstrucción. Si tu perro tiene una obstrucción por comer caca de gato, es posible que haya que extirparle parte de los intestinos. Afortunadamente, los perros, al igual que los seres humanos, pueden vivir con una parte del tracto intestinal. La extirpación quirúrgica de la zona afectada puede salvar la vida de tu perro, pero sin atención médica, puede morir.

Prevención. Una vez que tu perro se vuelve adicto a la caca del gato, es difícil corregir el mal hábito. Lo mejor en estos casos es colocar la caja de tu gato en un lugar donde tu perro no puede alcanzarla. Sin embargo, esto no evita que pueda comer los excrementos que encuentre fuera de la casa. Si tu perro tiene esta tendencia no debes permitirle que deambule sin supervisión.

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