El spaniel japonés se parece a otras razas originarias de Asia, se podría pensar que es un pequinés de raza mixta, un Shih Tzu o un Lhasa Apso. Aunque identificado como japonés, la raza se originó en China. Los antepasados de esta raza se sentaron en el regazo de los aristócratas chinos.
Criado como un perro de compañía, este canino disfruta de la compañía humana. Se puede relacionar bien con las personas, otros perros y gatos, a pesar de que podría ser tímido con los extraños y en situaciones nuevas. De hecho, muchos aficionados opinna que hay algo felino en este pequeño perro, sobre todo por su capacidad de ascenso. Por esa razón, se recomienda que para tener uno en casa, se debe configurar todo como lo harías para tener un gato, preservando los objetos rompibles sobre los que este podría saltar.
Ejercicios. Al igual que muchas razas de juguete, esta no requiere gran cantidad de ejercicio. Es una buena opción si vives en un apartamento o casa pequeña. Al sacarlo a pasear, usa un arnés y una correa en lugar de fijar la correa a un collar. Su cuello es frágil y su tráquea es vulnerable a tirar.
Aseo. La capa sedosa del spaniel japonés requiere aseo regular, pero no excesivo. Dos buenos cepillados a la semana, probablemente sean suficientes. Debido a su textura, el pelo de este perro no se enreda fácilmente. Dele un baño si está sucio o maloliente y utilice crema de enjuague después del champú para peinarlo mejor. A continuación, puede secarle el pelo con un secador en un nivel bajo o con una toalla.
Climas cálidos. Si vives en un clima cálido durante todo el año, esta no es la mejor raza para ti. Al tener el hocico corto, el spaniel japonés tiende a ser afectado por el calor, o sea, no puede enfriarse adecuadamente a sí mismo jadeando. Es preciso mantenerlo fuera del sol y llevarlo a pasear por la mañana y la tarde en el verano. Debe permanecer en un lugar con aire acondicionado cuando haga calor, así que déjalo encendido para él, incluso si vas a salir.
Cargando ...